Obras públicas

Sin entrar en una discusión política, intentaré dar mi punto de vista sobre el tema. Realmente una de las obligaciones del gobierno es administrar el dinero que le “regalamos” en impuestos en servicios que vean por nuestro bienestar. Creo que en algunos países se hace mas notable si el gobierno esta haciendo algo, y creo que es dependiente del nivel de infraestructura que hay en el país. Donde más hay es mas difícil hacer algo bien. Pero no deja de resonar que las obras públicas siempre son un asco!

Desde que vivo en Alemania y tengo auto he viajado esos 256km hasta Berlín sobre la A9, la condición de la carretera en el 2013 era muy buena a comparación de lo que yo conocía en México. De todos modos no ha habido un solo verano donde pueda manejar hasta Berlín sin tener que pasar una linda media hora en el trafico para poder entrar a una zona de construcción. Son realmente necesarias esas construcciones? seguramente no, pero el presupuesto ha sido asignado y el dinero se tiene que gastar, la veintiúnica constructora autorizada para hacer carreteras tiene el futuro hasta que lleguen los autos voladores asegurado.

Lo que es una constante mundial es que hay que ir al estilo Arthur Dent por la vida buscando planes de obra para poder enterarse que en algún punto incierto se va a encontrar uno a la mitad de un embotellamiento, o simplemente le va a tener que regresar a la oficina y pedir aventón, pues el tren ya no va a partir rumbo a casa en un viernes. Sales el domingo en camino a la estación central con la meta de encontrar la fecha de regularización de trafico de trenes, haz leído todos los planes de construcción y anuncios disponibles. Sales el lunes en el auto al trabajo, para enterarte de que alguien en Leipzig ha dejado el viernes por la tarde la “palomita” activa en el portal del tren alemán dejando creer a todo el mundo que la obra del viernes es de por vida.

De mis recuerdos de México tengo en la memoria haber vivido el inicio de la construcción del puente de Vaqueritos en Xochimilco, recuerdo poder terminarme el desayuno en el automóvil antes de llegar a la obra. He escuchado historias de terror sobre la construcción del 2. piso del Periférico…